Ante las alteraciones causadas por la pandemia de Covid – 19 en la alimentación y la agricultura, el Parlamento Latinoamericano y Caribeño (PARLATINO) exhortó a los gobiernos, los Parlamentos y la población de la región a que se aplique de manera integral el Plan para la seguridad alimentaria, nutrición y erradicación del hambre CELAC 2025.
Dicho plan sobre seguridad alimentaria fue preparado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas (CEPAL) y la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI).
El proyecto posee cuatro pilares como son: estrategias coordinadas de seguridad alimentaria a través de políticas públicas nacionales y regionales. Los países fortalecerán sus marcos jurídicos e institucionales en el tema, facilitarán el comercio, evitarán las pérdidas y desperdicios de alimentos y fomentarán programas de abastecimiento.
De igual manera, se promoverá el acceso oportuno y sostenible a alimentos inocuos, adecuados, suficientes y nutritivos para todas las personas. Para esto, el Plan CELAC fomenta los programas de transferencias condicionadas, la mejora de los mercados de trabajo y un fuerte apoyo a la agricultura familiar.
Otro de puntos del programa tiene que ver con el bienestar nutricional para todos los grupos vulnerables: promueve la alimentación escolar, con énfasis especial en conectar a los productores de la agricultura familiar a través de compras públicas y la promoción de hábitos saludables.
También busca garantizar la estabilidad de la producción y la atención oportuna ante desastres de origen socio-natutales por medio de la creación y mantenimiento de reservas de alimentos, la consolidación de los shocks públicos para emergencia.
Cabe destacar que los últimos datos sobre alimentación en América Latina y el Caribe en los últimos cuatro años revelan que 42,5 millones de personas padecían de hambre en el 2018, lo que representa un aumento de 4,5 millones de ciudadanos en comparación con los 38 millones de personas reportadas en el 2014.
Ese grave problema está previsto a agudizarse si se considera que la pandemia de Covid -19 es crisis mundial que ya está afectando al sector de la alimentación y la agricultura.