El cantante estadounidense R. Kelly fue condenado este miércoles en Nueva York a 30 años de cárcel por crimen organizado y abuso y tráfico sexual, 9 meses después de que fue declarado culpable en un proceso que se prolongó 6 semanas y en el que decenas de personas testificaron en su contra.
La estrella del R&B de la década de 1990, cuyo nombre completo es Robert Sylvester Kelly, y que ahora tiene 55 años, escuchó los testimonios de siete mujeres, muchos de ellos entre lágrimas, que volvieron a recordar frente al cantante el sufrimiento y las consecuencias de los abusos a los que las sometió, informaron medios locales.
Los fiscales alegaron que el séquito de mánagers y asistentes que ayudaron al cantante a conocer chicas, y a mantenerlas obedientes y en silencio, constituía una organización criminal. Dos personas han sido acusadas con Kelly en un caso federal separado pendiente en Chicago.
Kelly también fue declarado culpable de cargos penales según los cuales violó la Ley Mann, que hace que sea ilegal llevar a alguien a través de las fronteras estatales “para cualquier propósito inmoral”.
“Para las víctimas en este caso, se escucharon sus voces y finalmente se hizo justicia”, dijo la fiscal federal interina Jacquelyn Kasulis.