El presidente de la República, José Raúl Mulino, recibió este lunes a un grupo de pequeños, medianos y grandes proveedores, afectados por el cierre de la mina en el sector de Donoso.
Los empresarios señalaron al mandatario que están pasando por una difícil situación económica. que los ha obligado a despedir a muchos trabajadores y a reducir sus operaciones, tratando de evitar un cierre completo y la quiebra de sus negocios, con un cese definitivo de sus actividades.
El grupo, que había enviado previamente una misiva solicitando al Presidente, para explicarles personalmente la dura situación por la que están atravesando, estuvo representado por empresas proveedoras de diversa índole, que van desde suministro de maquinarias pesadas, alquiler de vehículos y el abastecimiento de diferentes insumos.
Los representantes de empresas que daban suministros a la minera, contaron lo que van venido padeciendo luego del cierre de la mina, y la situación económica que han tenido que afrontar, con pérdidas cuantificadas en varios milones de dólares.
Los afectados explicaron al presidente Mulino las repercusiones que ha tenido el cese de operaciones de la mina, y el impacto que continuará produciéndose, mientras no se reestablezca la actividad.
Reiteraron que además de sus empresas proveedoras, también se han perdido empleos que la actividad minera generaba de manera indirecta, lo que además se suma a las deudas millonarias que todos estos sectores contrajeron para poder continuar en la actividad.
Calificaron como «devastador» el cierre de la mina de Donoso. Explicaron que un 76% de los proveedores de la empresa minera han tenido que bajar drásticamente la cantidad de empledos que tenían, previendo que un 42% tendrá que cerrar actividades definitivamente, si no se reabre la actividad minera en el presente año.
Junto con el mandatario, fueron partícipes de la reunión los ministros Julio Moltó, de Comercio e Industrias y Juan Carlos Orillac, de la Presidencia.
