El gobierno del presidente Mulino se enfrenta a su primera crisis política. Con un Gabinete técnico más que político, el proyecto de ley sobre la Caja de Seguro Social es la que lo ha arrinconado a esta crisis en la que, incluso, su propio partido RM le quitó el respaldo. Y es que ese Gabinete técnico llevó una propuesta que puede tener todas las bondades que dicen, pero es impopular. Mulino, que no tiene una mayoría en la Asamblea, se ve obligado a hacer cambios oportunos, para rescatar su imagen de líder nacional con mucha proyección internacional. Ya no se trata de salvar el proyecto de la Caja y pasarlo; de lo que se trata es de que tenga estabilidad política y respaldo popular. No es el primero, ni será el último mandatario que enfrenta una crisis como la actual. De hecho, en Corea del Sur, El presidente Yoon Suk Yeol desató un conflicto sin precedentes al imponer la ley marcial en el país asiático. El Parlamento la revocó en menos de 24 horas, para frenar la crisis. En Francia, el primer ministro Michel Barnier fue expulsado del gobierno por una moción de censura del Parlamento. Quiso hacer una jugarreta con «la opción nuclear», en la que se aprueban leyes esquivando la votación parlamentaria y el precio que pagó fue su renuncia. Mulino necesita ahora sacar su cintura política y lograr consensuar los cambios que tengan que hacerse, para poder salir de este escabroso momento. A lo mejor, los aires del Sur lo iluminan para salir de la crisis. ¡Así de simple!
Editorial escrito por el periodista Gerardo Berroa Loo
