El director regional de Crime Stoppers, Alejo Campos, aseguró que la asociación directa entre pandillas ha producido una transformación en el crimen organizado, que ahora no solo está vinculado con el narcotráfico, sino que ahora incursiona en otros delitos, los cuales les proporcionan mayores ingresos, más rápidos de obtener y con más efectividad en su ejecución.
Durante su participación en el seminario «Entendiendo el crimen organizado y los delitos conexos, organizado por el Colegio Nacional de Periodistas con el respaldo de Crime Stopper, Campos aseguró que el crimen organizado «ha cambiado su forma de operar, aprovechando las vulnerabilidades del sistema para realizar sus actividades ilícitas».
Este cambio, enfatizó, hace que ahora en lugar de que un grupo criminal preste un servicio a otro más grande o de un rango mayor, con un pago en droga, dinero u otros productos de su actividad ilícita, el trato establece un vínculo conocido como «convergencia criminal», es decir, «que antes cada grupo se mantenía en su actividad delictiva, ya sea narcotráfico, contrabando, blanqueo de capitales o tráfico de personas; ahora estos grupos trabajan juntos en cada uno de estos actos delictivos, lo que los convierte en socios de la misma actividad delincuencial».
Para Campos, es claro que tanto en Panamá como en otros países de la región, «el crimen organizado internacional y las pandillas locales tienen vínculos. Los pandilleros conocen el entorno en donde realizan sus actividades delincuenciales, y en Panamá, las pandillas forman parte de esto».
El experto apuntó hacie cinco actividades donde esta cadena logística funciona a través de la delincuencia transnacional organizada. «El narcotráfico, la trata y tráfico de personas, el comercio ilícito, el tráfico de armas y los ciberdelitos forman parte de esta cadena logística del crimen organizado, dentro de un sistema de economías criminales en donde la corrupción, tanto pública como privada, está directamente involucrada». aseguró.
En todo esto, indicó, es preciso legislar para asegurar que el país cuente con las herramientas educativas y de trabajo que le impidan a las organizaciones criminales reclutar personas, destruyendo sus vidas y su futuro.
«Estamos convencidos que la manera de afrontar esta situación es de manera multidimensional porque la inseguridad no son solo los homicidios, o femicidios; la inseguridad también es la inseguridad alimentaria, la pobreza, la falta de oportunidades, las grandes inequiedades sociales, la falta de empleos, las desigualdades de género, la falta de un techo digno para vivir. Las necesidades sociales generan poblaciones vulnerables que son facilmente convencidas por el crimen organizado para sumarse a sus filas», explicó el líder regional de Crime Stoppers.
Por su parte, la presidenta del Colegio Nacional de Periodistas (Conape), Griselda Melo, destacó la importancia que tiene para los profesionales del periodismo la información precisa que llegue la ciudadanía y que sea de su conocimiento para evitar que las redes criminales socaven la sociedad panameña.
Aseguró que en fecha próxima, Crime Stoppers y el Conape tendrán otra actividad de capacitación y entrenamiento dirigida a periodistas en ejercicio.