Exministro de Salud reacciona en caso de perforadoras y pide una investigación objetiva
Luis Francisco Sucre pide que el proceso sea claro y que la actual administración continúe con los proyectos
Una semana después de que el presidente José Raúl Mulino expresara fuertes señalamientos por las supuestas irregularidades en la adquisición de perforadoras de pozos y bombas sumergibles, el exministro de Salud Luis Francisco Sucre se pronunció y reafirmó su compromiso con los principios de transparencia y buena gestión frente a la institución.
Sucre dijo que confía plenamente en que las investigaciones que se realicen en este caso, serán “objetivas, justas y apegadas a los principios legales” que rigen el país.
Dijo también, que es fundamental que estos procesos “sean claros para proteger los intereses de todos los miembros de nuestra comunidad”.
Sucre también hizo un llamado a la actual administración para que continúen con los proyectos. “Es crucial que el seguimiento administrativo continúe y que se garantice que los proveedores cumplan con sus obligaciones”, dijo el exministro de Salud en un comunicado.
El exfuncionario añadió que es crucial que la actual administración le de seguimiento a los procesos tal y como debe de ser, para no detener el progreso de los mismos y salvaguardando siempre los intereses del Estado.
Durante la conferencia de prensa semanal realizada el jueves pasado, el presidente Mulino instruyó al actual ministro de Salud, Fernando Boyd Galindo, para que interpusiera una denuncia formal ante el Ministerio Público por las múltiples irregularidades encontradas en contratos de compra de las perforadoras de pozo y bombas sumergibles gestionadas en la pasada administración.
De acuerdo con lo anunciado por el mandatario, las actas de aceptación de los diferentes equipos fueron emitidas entre el 5 de diciembre de 2023 y el 17 de diciembre de 2023, y las perforadoras fueron pagadas por adelantado en el mes de mayo de 2024. Sin embargo, los equipos fueron entregados realmente el 30 de junio de 2024.
Esto implica que las perforadoras llegaron a Panamá 6 meses después de la supuesta entrega descrita en las actas; casi dos meses después de que se pagaran totalmente; y dos días antes de entrar el nuevo gobierno.
No hubo acta oficial de la verdadera entrega. “Sencillamente, llegaron unos camiones adonde está el Instituto de Salud Mental, antiguo Hospital Matías Hernández, y fueron ubicadas en el patio el domingo 30 de junio, dos días antes de dejar el gobierno, y en horas de la noche”, explicó Mulino.
Adicionalmente, el manual de instrucciones de las perforadoras fue entregado en idioma chino, lo que hace imposible a los funcionarios del Minsa entender la forma de operarlas. Hasta la fecha, las especificaciones de la maquinaria no han sido entregadas. “Al no contar con las especificaciones técnicas ni manual de uso de las máquinas perforadoras, no existe certeza de que las mismas funcionen correctamente”, añadió el mandatario.
Sobre las irregularidades detectadas en la compra de bombas sumergibles, necesarias para el correcto funcionamiento de los pozos, dijo que la pasada administración del Minsa levantó un pliego de cargos con las especificaciones técnicas, pero una vez adjudicada la compra, el proveedor —de manera unilateral— indicó que no tenía disponibles las bombas descritas en el contrato y que las reemplazarían por otras diferentes, sin ningún tipo de documentación para acreditar su procedencia.
Esto fue aceptado por la administración anterior mediante memoriales, sin contar con el aval de la Contraloría General de la República, contrario a lo que ordena la Ley de Contrataciones Públicas.
Ante esta situación, el mandatario dijo que “a la mayor brevedad posible, seleccionaremos empresas idóneas que puedan realizar las perforaciones de pozos en las diferentes regiones del país”.