La lotería electrónica ya tiene sus días contados, ya que esta ha ocasionado una merma en los ingresos de la Lotería Nacional de Beneficencia y solo se benefician «algunos que lucran» con ese tema, anunció el presidente José Raúl Mulino anunció en su segundo conversatorio semanal.
“Nuestra Lotería Nacional de Beneficencia se quede en dominguito, gordito y miercolito, se acabó el resto”, anunció Mulino.
Y es que La lotería electrónica generó este año una venta bruta semanal de $900 mil, con una comisión del 12.5% para los billeteros, un poco más que la Lotería Nacional de Beneficencia, lo que equivale a $117 mil semanales.
Actualmente, la Lotería presenta altos índices de devoluciones llegando a alcanzar el 27% en los últimos 20 días, lo cual se considera un porcentaje alto para los estándares de la institución.
“Es institución será sometida a una transformación eficiente, transparente y honesta con el ánimo de ser una entidad de credibilidad y de beneficencia para el pueblo panameño”, dijo Mulino.
El mandatario aseguró que la institución carece de sistematización y solicitará a la Autoridad de Innovación Gubernamental y a las entidades correspondientes que intervengan para evitar un desastre y la quiebra.
Actualmente, la entidad cuenta con 13 mil 500 billeteros a nivel nacional y reciben una comisión del 10% por sus ventas.
