El presidente del SIP, Luis Frauca, expresó que en lugar de establecer una lista para iniciar una discusión técnica sobre la situación nacional se trató de introducir en el sistema económico del país.
«Esto no es el objeto de la discusión, nos parece que se está tratando de introducir un elemento ideológico disociador, por parte de los grupos protestantes», apuntó Frauca.
Indicó que se está tratando de presentar fórmulas que han fracasado en su gestión, anulando la capacidad productiva de los países en los que se ha impuesto como un experimento.
Se trata, aseguró el dirigente de los industriales, de «un ataque sistemático a la libre empresa, en las calles, con mensajes y medidas de presión violentas al margen de la ley».
Indicó que con esta propuesta «se ha mostrado la verdadera cara del movimiento que ha cerrado calles y prácticamente paralizado la economía del país, con afectaciones sumamente graves a la micro, pequeña y mediana empresa».
Junto con los presidentes de la Cámara de Comercio, Marcela Galindo, y del Consejo Nacional de la Empresa Privada, Rubén Castillo, el presidente del SIP exigió la ejecución de «una hoja de ruta que demuestre la voluntad de hacer cambios que atiendan el clamor de la sociedad».
Los empresarios exigieron al presidente Laurentino Cortizo ser parte de la mesa del diálogo, y le instaron a tomar medidas concretas, ya que la situación de cierre de vías y paralización de labores «amenazan la institucionalidad democrática, el sector industrial y productivo del país»